miércoles

De noche

El cielo oscuro envolvia nuestra esfera, la estrechez del momento nos acercaba, nos igualaba.

No movía los labios, pero le entendia perfectamente, en todo lo que decía, sin hablar.
Apoyados en antiguas persianas de locales abandonados deslice mi cabeza hasta apoyarla en su hombro, y, delicadamente serpenteo su delicada mano por mi pierna, hasta agarrar mi mano sin que me diera cuenta, en ese momento, comprendí que el permanecería allí,sentado, rozando parte de mi cuerpo, para simpre.


Hoy->D.R.U.G.S. The Raveonettes

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